El reconocido hotel cumple en 2018 su primer siglo sobre el mítico Paseo de Gracia en la ciudad Catalana. La experiencia

Barcelona es una de las ciudades favoritas de Europa, y gran parte de su impronta está en su historia y sus lugares icónicos que se han mantenido durante los años.

Si hablamos de hoteles, hay uno que es sinónimo de elegancia y servicio y que en 2018 está cumpliendo un siglo:

Majestic Hotel & Spa

 

El hotel Majestic es un icono en Barcelona y tiene una ubicación privilegiada sobre Paseo de Gracia en una esquine emblemática.

Su ubicación no solo permite tener vistas fantásticas de la ciudad, sino que nos deja a minutos de la mayoría de los puntos turísticos más atractivos.

Desde que llegué al hotel, pude percibir lo bien que está mantenida la propiedad que está cumpliendo 100 años, y que ha sabido modificarse y ampliarse con el tiempo, pero manteniendo su estilo original.

Es un hotel elegante y refinado, que demuestra su encanto desde el primer momento.

Los altos techos, sus antiguas columnas, su mobiliario y la correcta ambientación hacen del ingreso al hotel un placer.

Aunque desde afuera no logra percibirse, Majestic Hotel & Spa es un hotel de grandes dimensiones, que ha sabido unir nuevos edificios de una forma que todo se ensamble naturalmente.

Una vez hecho el check-in, pasé a mi suite, una de las tantos tipos de habitaciones que conforman el hotel.

Con un diseño exquisito, espacios confortables y un gran baño con bañera, la suite del hotel Majestic es todo lo que uno puede esperar en Barcelona.

Es que además de recibirme con champagne francés Ruinart (un acierto, ya que es una de las marcas favoritas) y frutas frescas, su balcón es una de las mejores ventajas.

Con vista plena al Paseo de Gracia, despegar en el hotel hizo que sea imposible olvidarme que estaba en Barcelona.

También pude conocer otras habitaciones y suites, ya que hay diferentes categorías y distribuciones, que por la naturaleza del edificio cada una es diferente.

Con variaciones en la decoración, algunas con toques más modernos, cada habitación que visité tenía su encanto.

Algunas de las suites más importantes, tienen grandes terrazas con jacuzzi.

La suite principal del hotel es la más grande de Barcelona, y tiene todo el encanto para recibir a las personalidades más exigentes que visitan la ciudad catalana.

En lo más alto, el hotel tiene una terraza con una vista única, que permite disfrutar de toda la ciudad, observando directamente a la Sagrada Familia, entre otros puntos estratégicos.

Ese lugar no solo es elegido por los huéspedes del hotel, sino también por locales y turistas que aprovechan el ambiente para disfrutar de un cocktail o alguna delicia catalana.

En cuanto a gastronomía, el desayuno es uno de los más completos, algo que se extiende al brunch dominical, uno de los más reconocidos de la ciudad y que en un must para quienes se encuentren un domingo en Barcelona.

Es recomendable reservar para el brunch, ya que es muy solicitado tanto por turistas como locales.

Majestic Hotel & Spa, es un hotel que después de cien años sigue siendo uno de los más exclusivos de Barcelona y realmente vale la pena elegirlo para quienes busquen una ubicación fantástica en un lugar histórico.

Lo que más me gustó

Su ubicación, su construcción bien mantenida y las vistas

Para quién es ideal

Tanto parejas, personas de negocios como familias se podrán sentir cómodos en el hotel

Mi recomendación

Aprovechar el brunch de los domingos