La propiedad de Four Seasons en la capital portuguesa ofrece lujo y exclusividad con una vista única

Sabemos que Four Seasons es sinónimo de hotel de lujo, y lo que sucede en la capital de Portugal no es la excepción.

Four Seasons Hotel Ritz Lisbon es el hotel más exclusivo de Lisboa y tiene mucho para convertirse en uno de mis favoritos en Europa.

Ubicado en la cima de una de las colinas de una ciudad que cada año recibe más atención y visitantes por su belleza y ambiente, este hotel tiene mucha historia, fue inaugurado en 1959, y mantiene las letras de Ritz en lo más alto, a pesar que desde hace más de 20 años opera bajo la marca Four Seasons.

Son aproximadamente 20 minutos para llegar desde el aeropuerto y tiene una ubicación privilegiada, visible desde diferentes puntos por su altura.

El ingreso es elegante y las flores tienen su espacio protagónico, algo muy habitual en los hoteles de la cadena.

Con muebles clásicos y obras de arte, no nos olvidaremos en ningún momento que estamos en el hotel más exclusivo de Lisboa.

El hotel tiene 282 habitaciones, con un diseño clásico.

Casi la totalidad de ellas ofrecen grandes balcones con mesa y sillas, donde podemos pedir el desayuno o incluso cenar en la privacidad.

El primer hotel en el que el gimnasio se convirtió en mi lugar favorito

Los gimnasios suelen ser espacios relativamente poco atractivos en los hoteles, los hay más grandes o más chicos, pero difícilmente atraigan a más personas que las que deseen ejercitar.

El caso de Four Seasons Hotel Ritz Lisbon es diferente, y ubicado en lo más alto del hotel, el gimnasio es una visita obligada.

Es que -además de ser un muy bien gimnasio que también recibe miembros que viven en la ciudad- está en lo más alto con una vista vidriada a toda la ciudad, donde el rio Tajo y el puente 25 de abril están al alcance de nuestros ojos.

Mejor aún, está rodeado de una pista para correr al aire libre que nos hará desear hacerlo en cualquier momento del día.

Pero no todo queda en la elegancia y la vista, ya que la gastronomía es uno de los fuertes del hotel.

El desayuno es uno de los mejores que he probado en Europa, con productos de primera calidad y un servicio impecable.

Varanda es el restaurante donde se ofrece el desayuno, y es también el mejor lugar para cenar.

Pude disfrutar de una cena en diferentes tiempos en Varanda, y puedo recomendar absolutamente esta experiencia.

Four Seasons Hotel Ritz Lisbon tiene también uno de los spa más importantes de Lisboa.

Ritz Spa ofrece diferentes tratamientos, masajes, pedicura, manicura, y todo lo que podemos esperar.


En las áreas comunes del spa, tenemos una piscina cubierta y espacios para relajarnos tanto interiores como exteriores.

Independientemente de toda la estructura, lo más destacado del hotel es su servicio, impecable desde que ingresé al hotel hasta que me fui, siempre buscando que mi experiencia sea perfecta y el objetivo estuvo logrado.

Si están pensando en viajar a Lisboa, Four Seasons Hotel Ritz Lisbon es definitivamente una opción excelente.